El 12 de diciembre, tercer domingo de adviento, se celebró la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe con una Santa Misa presidida por Mons. Richard Daniel Alarcón Urrutia, Arzobispo Metropolitano del Cusco. La Eucaristía fue concelebrada por el Padre Manuel Bravo Álvarez, párroco de la parroquia Señor de los Milagros.
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Mons. Alarcón mencionó que los domingos son muy especiales para todos los cristianos, porque son días de fiesta, alegría y gozo ya que se celebra la presencia de Jesús vivo y resucitado. También dijo que el regalo más grande que les ha dado Dios a los sacerdotes es servir a la comunidad, porque sostiene, anima y fortalece su vocación sacerdotal.
Asimismo nuestro arzobispo recordó que hace 45 años, celebró su primera Misa en el día de la Virgen de Guadalupe, a la cual le encomendó su sacerdocio, recordó que la alegría es importante, en la vida de los cristianos. Finalmente, la eucaristía concluyó con una oración y una Salve a la Virgen de Guadalupe.