Luego de permanecer cerrada por siete meses a consecuencia de la pandemia del COVID-19, la Basílica Catedral de Arequipa reabrió sus puertas este 26 de octubre para que los fieles puedan rezar de modo individual al Santísimo Sacramento y demás imágenes de su devoción.
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El Arzobispado de Arequipa anunció que la capilla donde se encuentra el Santísimo estará abierta de lunes a sábado, en el horario de 7 a.m. a 6 p.m., mientras que el templo mayor estará disponible al público de 7 a.m. a 10 a.m. y de 5 p.m. a 6 p.m. Los domingos, en cambio, la capilla y el templo estarán abiertos de 9 a.m. a 1 p.m.
Para las celebraciones litúrgicas, la Arquidiócesis de Arequipa aplicará las medidas de bioseguridad contempladas en el protocolo aprobado por la Conferencia Episcopal Peruana y el Ministerio de Salud, así como en las normas complementarias establecidas por Mons. Javier Del Río para esta Arquidiócesis. Entre esas medidas, se precisa como máximo el aforo del 20% de la capacidad del templo, el uso de mascarilla y el distanciamiento social de 2 metros.
Asimismo, en la puerta de ingreso se tomará la temperatura corporal y se procederá a desinfectar las manos y la suela de los zapatos. En el templo no habrá agua bendita ni se podrá tocar las sagradas imágenes para evitar el contagio. Cada visita tendrá una duración de 10 minutos y se recomienda a las personas vulnerables no asistir a los templos.
Para facilitar las confesiones y evitar riesgo de contagio, a partir del lunes 2 de noviembre se colocarán confesionarios en el atrio de la Catedral de Arequipa, de la firma forma como se hizo durante el Año de la Misericordia.
Parroquias y templos
En el caso de las parroquias, el Arzobispo de Arequipa ha dispuesto que los templos reabran sus puertas a partir de la primera semana de noviembre, tanto para la oración individual como para las confesiones y los bautizos. El lugar para la confesión estará en un ambiente amplio y ventilado, asegurando la confidencialidad y también el distanciamiento social necesario.
En cuanto a la celebración del bautismo, solo podrán asistir el niño a ser bautizado, sus padres y padrinos. Además, solo se podrá bautizar a una persona a la vez, a menos que sean hermanos. La preparación de los padres y padrinos se realizará de manera virtual. En caso del bautismo para adultos, la preparación deberá ser presencial y según el programa oficial de la Arquidiócesis.
«Por ahora se continuará transmitiendo la Santa Misa a través de las redes sociales de cada parroquia, aunque es muy importante ir preparándose para volver a celebrarla juntos en el templo, porque si todo va bien podremos hacerlo próximamente», dijo Mons. Del Río, exhortando a las personas a seguir cuidándose del nuevo coronavirus y a permanecer unidos en la oración.