El jueves 16 de junio en el Atrio de la Basílica Catedral del Cusco, Mons. Richard Daniel Alarcón Urrutia, Arzobispo Metropolitano del Cusco, celebró la Solemnidad del Corpus Christi, Eucaristía que fue concelebrada por Mons. Lizardo Estrada Herrera OSA. Obispo Auxiliar del Cusco, Mons. Gilbert Gómez Obispo de la Diócesis de Abancay, Mons. Pedro Bustamante Obispo de la Diócesis de Sicuani, Mons. Ciro Quispe López, Obispo Prelado de Juli, Mons. Edinson Farfán Obispo Prelado de Chuquibambilla y por el clero Diocesano y Religioso presente en la Arquidiócesis del Cusco. Misma que contó con la participación de las principales autoridades de la ciudad, mayordomos de los 15 Santos Patronos que acompañan la Solemnidad y feligresía general.
“Esta manifestación de fe no ha sido afectada por la pandemia, al contrario, a pesar de la tristeza y el sufrimiento la fe se ha fortalecido y engrandecido. El pueblo vuelve agradecido a retomar su fe en Dios, a seguir adelante con el testimonio de vida y amor”, dijo Monseñor Richard Daniel sobre el retorno de los fieles.
Además en su homilía mencionó que, la Santísima Eucaristía esta mañana, se nos manifiesta con estas tres palabras, qué queremos que queden grabadas en nuestra mente y nuestro corazón para esta nueva etapa histórica que estamos iniciando post pandemia, la Eucaristía es presencia, es palabra y es alimento, una presencia que nos fortalece, Dios con nosotros, no estamos solos, Dios nos acompaña y Él nos da la fuerza para retomar nuestro camino y restaurar las heridas de esta pandemia, nunca nos sintamos solos hermanos, Dios está con nosotros y siempre lo estará, porque es un Dios fiel.