Ofrecemos a continuación el mensaje publicado por la Conferencia Episcopal Peruana con motivo de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada 2021, que se celebrará este martes 2 de febrero, Fiesta de la Presentación del Señor:
Mensaje para la Jornada Mundial de la Vida Consagrada 2021
Hace 25 años, el Papa Juan Pablo II convocó a la Iglesia para la celebración de la primera Jornada Mundial de la Vida Consagrada el día 2 de febrero de 1995, Fiesta de la Presentación del Señor. Remarcó la finalidad de esta Jornada con estas palabras:
“La celebración de la Jornada de la Vida Consagrada, que tendrá lugar por primera vez el próximo 2 de febrero, quiere ayudar a toda la Iglesia a valorar cada vez más el testimonio de quienes han elegido seguir a Cristo de cerca mediante la práctica de los consejos evangélicos y, al mismo tiempo, quiere ser para las personas consagradas una ocasión propicia para renovar los propósitos y reavivar los sentimientos que deben inspirar su entrega al Señor (…).” (Juan Pablo II)
El Papa Francisco ha convocado para la XXV Jornada Mundial de la Vida Consagrada para el próximo 2 de Febrero y ha puesto como lema para la Jornada “La Vida Consagrada, Parábola de Fraternidad en un Mundo Herido”
“De un modo sencillo, el lema se hace eco, por un lado, de la condición llagada del ser humano y de la creación entera, en la que todos nos sentimos reconocidos y espoleados; por otro lado, evoca la vocación y misión de las personas consagradas en la Iglesia y en la sociedad, como signo visible de la verdad última del Evangelio, de la llamada perenne de Jesucristo y de la cercanía del Padre para con cada ser humano. Todo ello bajo la luz de la parábola del buen samaritano, un icono bellísimo que el papa Francisco ha querido revisitar y compartir en su última encíclica, Fratelli Tutti, proponiéndolo como faro y horizonte para toda la familia eclesial y humana.”
Con ocasión de la celebración de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, los Obispos del Perú queremos enviar a los consagrados y las consagradas nuestro afectuoso saludo, y testimoniarles nuestro aprecio por el testimonio de vida y la misión de la Vida Consagrada en el seno de nuestras iglesias locales. La gran diversidad de carismas de la Vida Consagrada es una verdadera riqueza en nuestra Iglesia.
Como señala el Documento de CELAM de Aparecida, “La vida consagrada es un don del Padre por medio del Espíritu a su Iglesia, y constituye un elemento decisivo para su misión. Se expresa en la vida monástica, contemplativa y activa, los institutos seculares, a los que se añaden las sociedades de vida apostólica y otras nuevas formas. Es un camino de especial seguimiento de Cristo, para dedicarse a Él con un corazón indiviso, y ponerse, como Él, al servicio de Dios y de la humanidad, asumiendo la forma de vida que Cristo escogió para venir a este mundo: una vida virginal, pobre y obediente.” (Aparecida 216)
“Desde su ser, la vida consagrada está llamada a ser experta en comunión, tanto al interior de la Iglesia como de la sociedad. Su vida y su misión deben estar insertas en la Iglesia particular y en comunión con el Obispo. Para ello, es necesario crear cauces comunes e iniciativas de colaboración, que lleven a un conocimiento y valoración mutuos y a un compartir la misión con todos los llamados a seguir a Jesús.” (218)
Queremos agradecerles por su presencia y testimonio en nuestras iglesias locales y en el seno de la Iglesia Peruana. Pedimos al Señor para que siga suscitando vocaciones a la Vida Consagrada de en medio de nuestra Iglesia. Que el Señor les siga bendiciendo y fortaleciendo en su servicio.
Fraternalmente en Cristo,
+ Miguel Cabrejos, O.F.M. Arzobispo Metropolitano de Trujillo Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana Presidente del CELAM | + Arturo Colgan, C.S.C Obispo Auxiliar de Chosica Presidente de la Comisión Episcopal de Vida Consagrada |