Dirección

Jr. Estados Unidos 838. Jesús María.
Lima, Perú.

Contáctanos

El Papa Francisco ha enviado un mensaje a los mil participantes de la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe, convocados en modalidad presencial y virtual, que desde este 22 de noviembre comienzan los grupos de trabajo para el discernimiento.

“Saludo cordialmente a los participantes en la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe, que se celebra del 21 al 28 de noviembre en la Ciudad de México con el deseo de impulsar una Iglesia en salida, sinodal, reavivar el espíritu de la V Conferencia General del Episcopado que, en Aparecida en 2007, nos convocó a ser discípulos misioneros”, ha dicho el Santo Padre.

Además ha recordado que este evento latinoamericano y caribeño busca, “animar la esperanza, vislumbrando en el horizonte el Jubileo Guadalupano en 2031 y el Jubileo de la Redención en 2033”.

“Les agradezco su presencia en esta Asamblea, que es una nueva expresión del rostro latinoamericano y caribeño de nuestra Iglesia, en sintonía con el proceso preparatorio de la XVI Asamblea general del Sínodo de los Obispos que tiene como tema «Para una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”, apuntó.

20211015-messaggio-ass-caribe

La escucha y el desborde

El Papa Francisco ha puesto en perspectiva dos palabras: Escucha y desborde, porque “a estas claves que vertebran y orientan la sinodalidad comunión, participación y misión”.

“La primera palabra es ‘escucha’. El dinamismo de las asambleas eclesiales está en el proceso de escucha, diálogo y discernimiento. En una Asamblea el intercambio facilita ‘escuchar’ la voz de Dios hasta escuchar con Él el clamor del pueblo, y escuchar al pueblo hasta respirar en él”, expresó.

En cuanto al desborde ha referido que “el discernimiento comunitario requiere mucha oración y diálogo para poder hallar juntos la voluntad de Dios, y también requiere encontrar caminos superadores que eviten que las diferencias se conviertan en divisiones y polarizaciones”.

En tanto “pido al Señor que vuestra Asamblea sea expresión del ‘desborde’ del amor creativo de su Espíritu, que nos impulsa a salir sin miedo al encuentro de los demás, y que anima a la Iglesia para que, por un proceso de conversión pastoral, sea cada vez más evangelizadora y misionera”.

Finalizó: “Queridos hermanos y hermanas, los animo a vivir estos días acogiendo con gratitud y alegría este llamado al desborde del Espíritu en el Pueblo fiel de Dios que peregrina en América Latina y el Caribe. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide con su protección maternal. Y, por favor, no se olviden de rezar por mí”.

Share: