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Por: Diario Ímpetu

En una destacada reunión llevada a cabo en el Hotel Sol del Oriente, líderes religiosos de diferentes denominaciones se congregaron para discutir los desafíos que enfrentan las comunidades amazónicas en su lucha por la preservación de sus derechos territoriales. Durante el encuentro, el Consejo Consultivo de la Iniciativa Interreligiosa para el Cuidado de los Bosques Tropicales (IRI) destacó la importancia de adoptar un enfoque de desarrollo sostenible y a largo plazo, en contraposición a una visión cortoplacista.

El diario local Ímpetu estuvo presente en esta reunión y recogió las palabras de algunos de estos líderes que tienen muy claro que la noción de desarrollo no implica únicamente un beneficio económico a corto plazo y que el derecho fundamental de quienes habitan nuestros bosques es precisamente el de un respaldo legal a esa pertenencia y dominio.

Monseñor Alfredo Vizcarra, Obispo del Vicariato Apostólico de Jaén, destacó la necesidad de repensar el concepto de desarrollo y su relación con la deforestación. “Desde la pandemia hemos quedado en ausencia del Estado. En 2020 fueron 200 mil hectáreas de deforestación. Hay que ver qué se entiende por prosperidad. No son conscientes de que deforestar para poder desarrollar un monocultivo en extensiones enormes de terreno afecta a un ecosistema y esto trae un perjuicio para el clima, para el propio bosque, en la diversidad de los animales y plantas y por supuesto de las mismas poblaciones que ahí habitan. Ese progreso es destruir, no estoy seguro de que esa sea la forma de progreso que nos interese”, sostuvo el líder religioso sobre formas de comercio como la que se practica en Ucayali en el rubro palmícola, especialmente grupos económicos como la cuestionada Ochosur. Además, señala que la base en que se fundamenta el actuar de la IRI es la ruta que trazó el mismo Papa Francisco.

“Dada la situación del cambio climático en el mundo, en el 2019 el Papa Francisco anunció el Sínodo de la Amazonía, esta encíclica está detrás de todo. La religión y la fe son factores muy importantes para llevar adelante una propuesta de transformación. La convicción que desde la religión se puede cambiar. Si no cambiamos de mentalidad, solo será maquillaje. Personas respetuosas de la vida, optan por introducir dentro de su trabajo el elemento religioso. La dimensión con el creador es muy fuerte. Expresado de diferentes maneras el origen de nuestra vida, de nuestra casa común es uno solo. Perú es el segundo que tiene una biodiversidad amazónica luego de Brasil. El papa visitó puerto Maldonado en crisis por la desbordante minería ilegal. Eso no solo trae contaminación, sino destrucción de los bosques, prostitución. Fue muy simbólico el gesto del Papa. Al decidir las políticas para el bienestar, dijo que no miren al costado. Afectar a la Amazonía es afectar a la población, es decir los pueblos originarios, son los que han vivido aquí desde siempre. Una manera de vivir cuya característica es vivir en armonía con los bosques”, recuerdó Monseñor Vizcarra, quien cuenta con un amplio historial como defensor de los derechos de los indígenas y una oposición férrea al avance de la deforestación por tala ilegal en Amazonas.

El Obispo de Jaén no esconde la crítica mayor a los planes y acciones que se gestan en los diferentes niveles de gobierno local, regional y nacional. Considera que la IRI es capaz de cambiar el panorama apoyando el empoderamiento y conocimiento sobre prevención para apoyar a las autoridades a frenar la tala ilegal y para ello recuerda su experiencia en Chiriaco, Amazonas.

“No existe una política de desarrollo para la Amazonia y si existe una mirada hacia ella es simplemente la que señaló el papa. Se considera a la Amazonía como una despensa de la que hay que extraer los recursos y nunca se van a agotar, y eso desde la justificación de que ahí están los recursos que nos van a dar dinero, pero eso no es así tan real”, enfatizó Monseñor Vizcarra, quien el jueves participará desde las 9:00 de la mañana, en una reunión al interior de la Catedral de Pucallpa en compañía de autoridades de distinto credo religioso.

Por su parte, el apu Julio Cusurichi, de la etnia shipiba de Madre de Dios, quien además fue ganador en 2007 del Golden Price y actualmente es miembro directivo de Aidesep, comentó que “es sumamente importante porque no solamente la iglesia, sino otras organizaciones religiosas, se juntan para trabajar acciones en favor de los derechos humanos y por eso como indígenas desde Aidesep y en Ucayali desde Orau apoyamos la lucha. Ese problema de la palma aceitera en Santa Clara de Uchunya lo venimos apoyando porque no puede ser posible que haya actividad económica en el mundo que pueda vulnerar los derechos de las comunidades. Las autoridades no han actuado a favor de la defensa de nuestros derechos, sino que hacen caso a sus intereses económicos. Desde Aidesep vamos a seguir apoyando la acción de Orau, porque los intentos de vulnerar derechos indígenas deben parar. Y ahora desde la IRI vamos a sumar esfuerzos para hacerlo. Hay más de 32 indígenas muertos por el hecho de defender su territorio y en Ucayali están la mayor cantidad de líderes bajo amenaza”.

“El que les habla esta denunciado por una empresa maderera en Madre de Dios. No nos van a callar ni atemorizar ni dan miedo, porque lo único que hacemos es defender los derechos de los pueblos sin voz. Llamamos a los medios para que se preocupen y felicito a los que puedan ayudar. Llamo a la población de la Amazonía a defenderse”, finalizó.

En la misma línea se pronunció Silvana Baldobino, quien es parte del Consejo Asesor de la IRI en temas legales y coyuntura política. La abogada la tiene clara respecto del sonado caso de Santa Clara de Uchunya. “Yo creo que el caso de Santa Clara de Uchunya es el reflejo de lo que pasa a nivel de país, con la falta de seguridad jurídica en los territorios indígenas y la demora en el tema del reconocimiento de sus derechos. Lo que es desarrollo para unos no lo es para otros. La base de todo debería ser el respeto de los pueblos porque tienen un sistema de ancestralidad del uso del territorio”, sostuvo.

La IRI cuestiona el actuar de las autoridades, sin embargo, no se cierran ante el dialogo, prueba de ello es que han cursado invitación al gobernador Manuel Gambini para asistir a la cita de mañana jueves en la catedral. Ese mismo día más temprano, Gambini recibirá en su despacho a las nuevas autoridades de ORAU, quienes exigen la destitución del actual gerente regional de desarrollo de los pueblos indígenas, reclamo que advierten “traerá cola” a la gestión del colorao.

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