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Jr. Estados Unidos 838. Jesús María.
Lima, Perú.

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La Diócesis del Callao celebró la clausura del Año Pastoral 2023 en el marco de la Solemnidad de Cristo Rey, en donde además se ordenaron seis nuevos sacerdotes. Esta gran celebración tuvo lugar en el Estadio “Facundo Ramírez”, en Ventanilla, lugar a donde llegaron en peregrinación miles de fieles de todas las parroquias chalacas, acompañadas de sus respectivas imágenes junto a sus patrones y patronas. 

Esta peregrinación forma parte de la acción significativa del mes, dentro del marco de la puesta en marcha del Plan Pastoral Diocesano, que promueve Mons. Luis Alberto Barrera, MCCJ, Obispo del Callao.

Durante las primeras horas de la mañana, las delegaciones de las parroquias fueron acercándose al lugar de encuentro, siendo recibidos y animados por Mons. Barrera. Ya en el estadio, donde estaban congregados cerca de cinco mil personas, se dio inicio a una charal de formación, en donde se reflexionó acerca de la comunión, a cargo del P. Juan Armando Goycochea Calderon, MCCJ, Vicario de Pastoral de la Arquidiócesis de Lima.

Luego de ese momento, se dio inicio la ceremonia eucarística, presidida por Mons. Luis Alberto, y concelebrada por todo el clero chalaco. En la celebración recibieron la orden sacerdotal los diáconos Francisco Gonzáles, Jesús Luján, César Landa y Diego Quineche, todos ellos formados en el Seminario Diocesano “Corazón de Cristo”. Asimismo, fueron ordenados presbíteros, los diáconos, David Giaccarini y Huber Cáceres, ambos formados en el Seminario “Redemptoris Mater y Juan Pablo II”.

Durante la homilía, el Obispo del Callao manifestó su alegría por la culminación del año pastoral en medio de un ambiente de comunión y confraternidad:
“Estamos en esta celebración, como parte de un evento significativo de nuestra diócesis. Peregrinar es el modo de ser de nosotros los cristianos. Estamos siempre en movimiento, peregrinando en fe, la fe es un continuo crecimiento y movimiento. El pueblo de Dios no es estático, sino peregrino.  Vamos en busca de esa ciudad, de esa nueva Jerusalén, que el Señor nos ha prometido. Esa es una realidad, porque nadie se queda en este mundo, estamos de paso, somos peregrinos, anhelamos la patria eterna, al encuentro definitivo con Dios. Hemos querido peregrinar, con nuestros gozos, nuestras alegrías, pero también con nuestras heridas, y quizá nuestras eficiencias”. 

Más adelante el Obispo chalaco, reflexionó acerca de la importancia de la figura del sacerdote en la iglesia y en medio del pueblo, dirigiendo a los nuevos candidatos al sacerdocio:

El pueblo de Dios, el pueblo sacerdotal necesita de los ministros que lo sirvan. Participando del sacerdocio del obispo, ustedes están llamados a enseñar al pueblo de Dios, ser aquellos que transmitan la fe. Transmitir aquello que creemos y que sintetiza en el Credo. Tienen que enseñar las verdades de la fe. Pero sobre todo tienen que ayudar al pueblo de Dios a que conozcan y amen a Jesucristo como único Señor, y eso lo harán con el ejemplo de sus vidas. Participando del sacerdocio del obispo, ustedes también santificarán al pueblo de Dios. Esa santificación llega a su culmen cuando ustedes celebran la eucaristía y los sacramentos

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