Bajo el lema “Juntos somos mejores”, decenas de voluntarias peruanas y venezolanas de la Brigada Gracias Causa realizaron con éxito una campaña de reforestación que consistió en la siembra de 100 plantas nativas en la comunidad de Mayrasco, en el distrito de Santiago, Cusco. Esta iniciativa ambiental es impulsada por Cáritas Cusco con el apoyo de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, con el fin de demostrar que para cuidar nuestro medio ambiente no existe nacionalidades, pues todos somos «ciudadanos universales».
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Esta campaña verde, que se llevó a cabo el 15 de mayo pasado, tiene como objetivo promover la integración y fortalecer los lazos de hermandad entre peruanos y venezolanos, en el marco del proyecto “Proyecto Resilientes: Refugiados y Migrantes por la solidaridad”, gestionado por ambas instituciones, en coordinación con el Área de Participación Ciudadana de la Gerencia de Desarrollo Social de la Municipalidad Distrital de Santiago, Cusco.
“Me siento feliz de haber sido parte de esta iniciativa, no importa de dónde seas ni en donde estés, cuidar el medio ambiente es importante porque el planeta es uno solo», sostuvo Alain Dorado, voluntario cusqueño, en el video que promociona esta campaña ambiental.
Por su parte el representante de Cáritas Cusco, Álvaro Sani enfatizó, enfatizó que todos “podemos hacerle frente a los efectos del cambio climático con buenas prácticas ambientales, por ello el esfuerzo de brigada es un ejemplo a seguir y nos enseña a cómo podemos contribuir cuando nos enfocamos en las causas que nos unen”.
La actividad que realiza la Brigada “Gracias Causa” forma parte de la campaña de integración y solidaridad entre peruanos y venezolanos #TuCausaEsMiCausa.