El Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana y Arzobispo de Trujillo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, se pronunció este viernes 9 de abril sobre la «sombría noticia» que hace un año los restos de más de 400 personas víctimas del COVID-19, en Iquitos, fueron depositados clandestinamente en una fosa común a espaldas de sus familiares.
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«Nos avergüenza y deshumaniza como sociedad. Todo ser humano tiene dignidad por ser hijo de Dios», dijo el también Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM). Mons. Cabrejos expresó su solidaridad a los hermanos y hermanas de Iquitos y dijo que ellos tienen derecho a conocer la verdad.
«Hago un llamado a las autoridades sanitarias y del Gobierno Regional de Iquitos para que trabajen por esclarecer este hecho y den paz a los familiares de los fallecidos que deben saber dónde yacen los restos de sus seres queridos, por un sentido de justicia, verdad y dignidad», exhortó.
A continuación, el Pronunciamiento de Mons. Miguel Cabrejos:
Mensaje-Fosa-Comun-en-Iquitos-09-04-2021-1
