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Lima, Perú.

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El Observador Permanente de la Santa Sede ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Mons. Juan Antonio Cruz Serrano, saludó y agradeció, a través de una carta, a este organismo regional por manifestar su «solidaridad y apoyo» al Estado peruano ante el derrame de más de 11.000 barriles de petróleo producido en Perú, el pasado 15 de enero, a cargo de la empresa Repsol.

Como se sabe, el miércoles 9 de febrero, se llevó a cabo el Consejo Permanente extraordinario de la OEA, donde se aprobó la declaración de emergencia frente a la “consternación por las graves consecuencias ambientales, económicas, sociales y de la vida y la salud” generadas por el vertimiento del crudo en el mar de Ventanilla, en Perú.

“Desearía transmitir el pesar y la cercanía del Papa Francisco al Gobierno y al pueblo peruano, de modo particular a todos los afectados directamente, como los pescadores y a los pobladores de la franja de playa-litoral, por este grave daño ecológico y medioambiental», mencionó, Mons. Cruz. Al mismo tiempo, agregó que la Iglesia, mediante sus comunidades locales y organizaciones que están en Perú, como Cáritas Lima y Resucita Perú Ahora, iniciativa pastoral animada por la Conferencia Episcopal Peruana, «ha puesto en marcha varios proyectos para ayudar y sostener a los damnificados del derrame de petróleo en estos momentos difíciles”.

A continuación, la Carta de Mons. Juan Antonio Cruz Serrano:

Declaracion-Santa-Sede-ante-OEA

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