La Diócesis del Callao se prepara para dar inicio a la celebración del momento litúrgico más intenso de todo el año: la Semana Santa. Estas celebraciones serán presididas por Mons. Luis Alberto Barrera, MCCJ; Obispo del Callao, del 21 al 31 de marzo del presente año.
El domingo 24 de marzo, “Domingo de Ramos”, se realizará el recorrido procesional y bendición de ramos. Este comenzará a las 8:00 a.m., en la Capilla “San Judas Tadeo” (Prolongación José Gálvez Mz. B, Lt. 3, Sector E – Callao), con dirección al Jr. Lord Cochrane. Luego Jr. Ancash, cruzando la Av. Miguel Grau por la Av. 2 de mayo, para finalmente terminar la Parroquia “Inmaculada Concepción”, en donde, a las 10:00 a.m. se realizará la Santa Misa.
Es importante recordar que, con esta celebración, debemos disponernos a dedicarnos a la oración y reflexión en los misterios de la Pasión y Muerte de Jesús para aprovechar todas las gracias que esto nos trae.
El Jueves Santo, 28 de marzo, se llevará a cabo la Misa Crismal, a las 10:00 a.m., en la Basílica Nuestra Señora del Carmen de la Legua. La misa crismal, presidida por el obispo y concelebrada con los sacerdotes de la diócesis, es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma (de aquí el nombre de misa crismal); y bendice además los restantes óleos o aceites (para los enfermos y los que se van a bautizar).
Ese mismo día, en horas de la noche, a las 7:00 p.m., en la Parroquia “San Pedro Nolasco”, recordamos la Última Cena de Jesús con sus apóstoles en la que les lavó los pies dándonos un ejemplo de servicialidad. En la Última Cena, Jesús se quedó con nosotros en el pan y en el vino, nos dejó su cuerpo y su sangre. Es el jueves santo cuando instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio.
El Viernes Santo, 29 de marzo, a las 10:00 a.m., el Obispo del Callao, Mons. Luis Alberto Barrera, MCCJ; visitará el Centro Penitenciario “Sarita Colonia”, en donde participará en el Vía Crucis, en donde los internos del penal escenificarán el camino de la cruz que realizo nuestro Señor Jesucristo. Ese día recordamos la Pasión de Nuestro Señor: Su prisión, los interrogatorios de Herodes y Pilato; la flagelación, la coronación de espinas y la crucifixión.
A las 3:00 p.m., en la Iglesia Matriz, Catedral del Callao, se realizará el Sermón de las Siete Palabras. A las 5:00 p.m., la adoración de la Cruz.
El Sábado Santo, 30 de marzo, el obispo chalaco presidirá la Vigilia Pascual, a las 8:00 p.m., en la Parroquia “La Sagrada Familia”, en el distrito de Bellavista.
En esta celebración se acostumbra bendecir el agua y encender las velas en señal de la Resurrección de Cristo, la gran fiesta de nosotros los católicos.
Finalmente, el Domingo de Resurrección, 9 de abril, habrá dos celebraciones, la primera, será una procesión que comenzará de la Parroquia “Virgen de la Macarena”, a las 4:00 p.m., con dirección a la Av. Pacifico. Luego, Av. Haya de la Torre hasta Huáscar, entrando al punto de encuentro, en la Urb. Las Moreras, a las 4.40 p.m. Continuando el recorrido hacia Huamachuco, luego por la auxiliar de la Av. La Paz, para finalizar nuestro recorrido hasta la Parroquia “La Resurrección de Cristo”, en donde a las 6.00 p.m. se celebrará la Santa Misa de Pascua de Resurrección del Señor.
Para vivir la Semana Santa, debemos darle a Dios el primer lugar y participar en toda la riqueza de las celebraciones propias de este tiempo litúrgico.
A la Semana Santa se le llamaba en un principio “La Gran Semana”. Ahora se le llama Semana Santa o Semana Mayor y a sus días se les dice días santos. Esta semana comienza con el Domingo de Ramos y termina con el Domingo de Pascua.
Vivir la Semana Santa es acompañar a Jesús con nuestra oración, sacrificios y el arrepentimiento de nuestros pecados. Asistir al Sacramento de la Penitencia en estos días para morir al pecado y resucitar con Cristo el día de Pascua.
Lo importante de este tiempo no es el recordar con tristeza lo que Cristo padeció, sino entender por qué murió y resucitó. Es celebrar y revivir su entrega a la muerte por amor a nosotros y el poder de su Resurrección, que es primicia de la nuestra.
La Semana Santa fue la última semana de Cristo en la tierra. Su Resurrección nos recuerda que los hombres fuimos creados para vivir eternamente junto a Dios.