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Ante un mundo lleno de indiferencia y egoísmo, hace falta el ejemplo de Sor ‘Aguchita’ que nos muestra el camino a la fraternidad universal. Esta fue la reflexión de Monseñor Gerardo Zerdín, O.M.F., Vicario Apostólico de San Ramón, al destacar las virtudes y el legado que nos ha dejado la religiosa peruana María Agustina Rivas López, Mártir de la Misericordia, quien será beatificada este sábado 7 de mayo, en la localidad de La Florida (Chanchamayo, Junín). La Santa Misa será presidida por el Cardenal Marcello Semeraro, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.

Como se recuerda, Sor ‘Aguchita’, de la comunidad del Buen Pastor, fue asesinada por el grupo terrorista Sendero Luminoso el 27 de septiembre de 1990, mientras desarrollaba su misión pastoral con el pueblo indígena Asháninka, en la selva central del Perú. Su beatificación fue aprobada por el Papa Francisco el año pasado, luego de que la Congregación para las Causas de los Santos reconociera el martirio de la Sierva de Dios.

En el contexto del proceso de su beatificación, Monseñor Gerardo Zerdín concedió una entrevista a Vatican News:

¿Cuáles son las virtudes cristianas que Aguchita nos ha dejado? ¿Qué es lo que más la ha caracterizado en su vida religiosa donada hasta el extremo?

R/. La Iglesia proclama a los santos para que sean ejemplos de vida cristiana y el ejemplo de ellos, de los santos y beatos, tiene que iluminar a todos nosotros. Por eso, se han visto esas virtudes de la hermana Aguchita, no es la única virtud que haya dado su vida, en el momento del sacrificio, de su martirio, sino más bien toda su vida ofrenda al Señor, los momentos de su compromiso vocacional, los votos y como la ha vivido, en un alto grado de servicialidad hacia todos, una alegría que ha demostrado siempre al servicio y que con la oración tenía la fuerza para poder cumplir a cabalidad su servicio a todos y digamos, como parte final, se ha cumplido su deseo de ser misionera en la selva.

Aguchita misionera en la selva peruana
Aguchita misionera en la selva peruana

¿Qué representa la beatificación de Aguchita para la iglesia particular de San Ramón y para la iglesia peruana?

R/. Qué es lo que significa Aguchita para nosotros, pues, para nosotros nos motiva mucho porque no es cosa de cada día. Estamos todos, todos los del Vicariato estamos en eso de cómo celebrarlo adecuadamente después de esas prohibiciones de encuentros de mucha gente en un solo sitio a causa de la pandemia, y hemos esperado este año para poder celebrarlo adecuadamente. Y que a todos nosotros nos motive no solamente a la resistencia, al martirio, sino como un paradigma más de una peruana del Perú profundo, del Perú quechua, que ha alcanzado esos niveles de servicio, de santidad. Y que nos motive a todos, especialmente motive para la vocación religiosa, para la vida religiosa y también para la vida de servicio laical y servicio sacerdotal.

Aguchita trabajando con el club de madres de La Florida
Aguchita trabajando con el club de madres de La Florida

¿Qué mensaje nos deja Aguchita con su vida de servicio y entrega? ¿Cuál es su legado para la Vida Religiosa y para todos los cristianos?

R/. Diríamos así, La Florida llena de flores, de plantas, que significo tanto para Aguchita y los vivientes pobres, ellos serian el eje de su mensaje. Justamente en la línea del Papa Francisco, en la línea de la Laudato si, de admirar la naturaleza cómo creación de Dios no solamente algo que hay que explotar, sino algo que hay que admirar, algo por lo que hay que convivir y alabar al Señor. Además, la gente necesitada, la gente pobre, que nos da tanta amistad y agradece todo lo que les podemos dar para que mejore la calidad de su vida. Creo que es algo muy actual, incluso dejando de lado las luchas que hoy día existen, enfrentamientos, confrontaciones, sobre eso, Aguchita, derrama su dulzura, esa miel de su carácter, con una vida entregada totalmente. Creo que muy en la línea de las vocaciones que hoy necesitamos dentro de este mundo egoísta y de darse y de poco a poco ir creando alrededor de uno ese Reino de Dios que es la fraternidad universal que no es una ilusión, una utopía, sino que es algo real, tal como también lo afirma el Papa Francisco, buscando formas de cómo se puede llevar eso a cabo en la realidad, cómo hacerlo viable.

Profesión religiosa de Aguchita
Profesión religiosa de Aguchita

Una vida donada al servicio

Aguchita nació el 13 de junio de 1920 en Coracora, Perú. A los 14 años se trasladó a Lima para estudiar en el Colegio Sevilla, dirigido por las Hermanas de la Congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor. Atraída por la vida consagrada, ingresó en la Congregación en 1941, donde emitió su profesión religiosa perpetua el 8 de febrero de 1949. En 1988 fue enviada a la misión de la Congregación en el pueblo de La Florida, donde permaneció a pesar de los peligros y riesgos que corrió.

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