Más de cien jóvenes peruanos vivieron un momento de profunda emoción y alegría al ser recibidos en audiencia por el Papa León XIV, el pasado lunes 28 de julio, en el marco del Jubileo de la Juventud. El encuentro tuvo lugar en la Sala Clementina del Vaticano y reunió a representantes de 46 jurisdicciones eclesiásticas del Perú, quienes sintieron este momento como un abrazo de fe con el “Papa nuestro”, como muchos ya lo llaman.
“Esto es muy importante: lo que experimentarás aquí no es solo para ti… Que, al regresar al Perú, inunden esas tierras con la alegría y la fuerza del Evangelio”, fueron algunas de las palabras del Santo Padre durante la audiencia, en la que animó a los jóvenes a no guardar esta experiencia como un simple recuerdo, sino a vivirla y compartirla como testigos de una Iglesia viva, alegre y misionera.

La delegación oficial de la Conferencia Episcopal Peruana estuvo acompañada por Mons. Víctor Emiliano Villegas Suclupe, obispo de la Prelatura de Chota, quien expresó su felicidad por la cercanía mostrada por el Papa durante el encuentro. En entrevista con la agencia católica italiana SIR, el prelado comentó: “Fue muy cordial. En Chiclayo, cuando era nuestro obispo, siempre estuvo muy cercano a los jóvenes, con gran disponibilidad. Me cuesta un poco imaginarlo ahora en el Vaticano con el protocolo, pero también eso es parte de su nueva misión como Sucesor de Pedro”.
El vínculo entre León XIV y los jóvenes peruanos es profundo. Como recordó la hermana Pilar Neira, secretaria ejecutiva de la Pastoral Juvenil Nacional, en declaraciones también brindadas a SIR, “cuando estuvo en el Perú siempre estuvo muy cercano a nuestra pastoral. Los jóvenes están muy contentos porque tenemos un Papa peruano”. En ese sentido, señaló que ya se vienen preparando para la Jornada Nacional de la Juventud 2026, que se celebrará en la diócesis de Chulucanas, donde el actual Papa fue misionero. Se espera que más de 4,000 jóvenes participen de este gran encuentro, como respuesta al llamado del Santo Padre a “inundar el país con la alegría del Evangelio”.

Uno de los testimonios más entrañables fue el de Ximena Alejandra Valdivia Muro, joven laica de Chiclayo, quien compartió su emoción por reencontrarse con quien la llamó a servir en la pastoral juvenil. “Aunque seamos pocos en Roma, nos sentimos los jóvenes del Papa”, expresó a SIR. El pasado 8 de junio, junto a otros jóvenes de su diócesis, vivió su propio Jubileo local en el santuario de Motupe, un lugar muy querido también por el propio cardenal Prevost. “Serví poco tiempo con él, pero recuerdo su acompañamiento constante, su atención personal, la fuerte cercanía que también mostraba hacia mí”, comentó.
También estuvo presente el seminarista Luis Omar Tasso, excoordinador de pastoral juvenil en Chiclayo, actualmente en formación con los Padres Combonianos en Sudáfrica. En diálogo con SIR, compartió que su vocación nació durante la JMJ de Panamá en 2019, y que fue el mismo cardenal Prevost quien insistió en que participaran. “La presencia de Mons. Prevost era discreta pero constante, siempre asistía a las reuniones y su disponibilidad aún hoy me conmueve”, afirmó. Recordó también una anécdota: “Una vez, en la catedral, celebrábamos con música. El obispo llegó y pensábamos que nos llamaría la atención, pero solo quería saber qué hacíamos. Nos animó a seguir. Eso también es sinodalidad”.

Durante el encuentro con el Papa, los jóvenes entregaron una estola tejida por manos peruanas que no pudieron viajar, como símbolo de comunión. Además, el mismo 28 de julio participaron en la Misa por el Día Nacional del Perú, conmemorando la independencia, lo cual reforzó su identidad y compromiso con la transformación social y espiritual del país.
