Luego de recibir la bendición del Arzobispo de Lima, Monseñor Carlos Castillo, el Señor de los Milagros inició su recorrido procesional por las principales calles de la capital con motivo del Mes Morado. Miles de fieles se congregaron en los exteriores del Santuario Las Nazarenas para acompañar, con paso firme, el camino de nuestro Cristo Moreno.
Antes de la salida del Señor, Monseñor Castillo recordó que este primer peregrinaje es una oportunidad para vivir en actitud de recogimiento y unidad, reconociendo la mirada misericordiosa de Dios que se entrega totalmente a nosotros.
El Primado del Perú anunció que se viene haciendo una convocatoria general para acompañar los demás días de procesión con una flor blanca como signo de la pacificación que deseamos para nuestro país, y que de este modo «cesen los asesinatos, todo tipo de maniobras, depresiones y, sobre todo, las extorsiones».
«En todo el mundo estamos en esta debilidad humana terrible de recurrir a la violencia, a la agresión y a la destrucción». Por eso, el camino para conseguir la paz y la justicia pasa por un tema de conversión personal y social.
Encomendando nuestro pueblo a la Virgen de la Nube, el Arzobispo de Lima hizo un llamado a no vivir en la mezquindad y permanecer encerrados en nuestro egoísmo, sino abrir nuestro corazón para mirar hacia el Señor y hacia la vida.
En su primer recorrido, el Cristo de Pachacamilla visitó el Convento de Santa Rosa de Lima, el Arzobispado de Lima y el Edificio de la Hermandad del Señor de los Milagros. Su próximo recorrido se dará el próximo 18, 19 y 28 de octubre. El último día de procesión será el 1 de noviembre.