A través de un videomensaje, el Papa Francisco recordó que fue llamado por Dios cuando estaba en edad de jubilación para ser el Sucesor de Pedro. Lo dijo para dar esperanza y llamar a la fe a los ancianos y a los adultos mayores, pues notó la tristeza de muchos de ellos abandonados o golpeados por la soledad durante la pandemia.
LEA TAMBIÉN: Papa Francisco recibe en audiencia privada a Mons. Miguel Cabrejos, Presidente del CELAM y del Episcopado Peruano
Y anunció que nadie se retira de la tarea de anunciar el Evangelio, de transmitir las tradiciones a los nietos y jóvenes. Pero, a estos últimos les llamó para ser instrumentos de amor, caricias, abrazos y atenciones para los adultos mayores.
“¡Que cada abuelo, cada anciano, cada abuela, cada persona mayor —sobre todo los que están más solos— reciba la visita de un ángel!”, expresó el Santo Padre en un videomensaje publicado hoy con motivo de la Primera Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, que la Iglesia Católica celebrará el 25 de julio 2021.
Yo estoy contigo todos los días
Asimismo, dijo que la pandemia ha sido una “tormenta inesperada y violenta“ que ha golpeado la vida de todos, pero que a nosotros mayores nos ha reservado un trato especial, un trato más duro“.
“Yo estoy contigo todos los días”. Precisamente es este el titulo de la primera Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores instituida por el papa Francisco, 84 años. “Muchos de nosotros se han enfermado, y tantos se han ido o han visto apagarse la vida de sus cónyuges o de sus seres queridos. Muchos, aislados, han sufrido la soledad durante largo tiempo“, afirmó el Papa.
En este contexto, por voluntad y reconocimiento del obispo de Roma, ahora los abuelos y las abuelas del mundo serán recordados por la Iglesia y los fieles este 25 de julio de 2021.
La celebración se realizará cada año, instituida para su festejo el cuarto domingo de julio.
“El Señor conoce cada uno de nuestros sufrimientos de este tiempo. Está al lado de los que tienen la dolorosa experiencia de ser dejados a un lado. Nuestra soledad —agravada por la pandemia— no le es indiferente“, añadió.
Nadie se jubila de anunciar el Evangelio
El Papa explicó que nadie se retira de la tarea de anunciar el Evangelio, de la tarea de transmitir las tradiciones a los nietos. “Es necesario ponerse en marcha y, sobre todo, salir de uno mismo para emprender algo nuevo”.
“No importa la edad que tengas, si sigues trabajando o no, si estás solo o tienes una familia, si te convertiste en abuela o abuelo de joven o de mayor, si sigues siendo independiente o necesitas ayuda, porque no hay edad en la que puedas retirarte de la tarea de anunciar el Evangelio”.
El Papa reiteró que el Espíritu Santo no nos abandona ni siquiera en la hora del crepúsculo de los años: “Como he repetido en varias ocasiones, de la crisis en la que se encuentra el mundo no saldremos iguales, saldremos mejores o peores”.